Polilla Tramposa es uno de los juegos más curiosos que hemos analizado en esta sección de juegos de mesa. Al ser un juego de cartas y no tener otros elementos, lo que se puede esperar de este juego es que sea sencillo, algo que cumple a la perfección. La vuelta interesante del juego es que incorpora la posibilidad de hacer trampa parte del juego, siendo de hecho esta parte, indispensable para salir victorioso de cada partida.
Las trampas más comunes que se realizan en este juego son los trucos de cartas básicos que debe saber hacer un buen mago: hacer desaparecer cartas delante de los ojos de la gente. Por suerte, si no eres muy habil haciendo bailar estos trozos de carton, existen otro tipo de trampas que colarán o no, en función de lo atentos que estén el resto de jugadores.
Polilla Tramposa es un juego de Devir, perfecto para llevar de viaje, perfecto para jugar con los más pequeños y perfecto para regalar. Su precio es bastante bajo y si encuentras una buena oferta como la que ponemos aquí abajo, mejor que mejor.
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Resumen
Número de jugadores: Minimo de 3 jugadores y máximo de 5 jugadores. Respecto a la edad, recomendamos que lo jueguen niños mayores de 6 años.
Duración de las partidas: Entre 15 y 20 minutos cada partida.
Estrategia / Azar: Este juego más que sobre estretegia depende de la habilidad.
Habilidades que pondrás en práctica: Rapidez mental, habilidad manual.
Elementos del Juego
El juego Polilla Tramposa se compone unicamente de 72 cartas ilustradas. Son cartas a color tienen un número asignado. Dentro de las 72 cartas, que son completamente iguales por atrás, encontramos distintos tipos:
Chinche: Una sola carta que va pasando de un jugador a otro. Quien la tenga será el encargado de vigilar al resto de los jugadores para que no hagan trampa.
Cartas de Insectos:
- Araña: El jugador que la juega le da una de las cartas que tiene en su mano a otro jugador. (No se pueden dar cartas de polillas tramposas).
- Hormiga: Si se juega una hormiga, todos los jugadores roban una carta del mazo, excepto el que la ha jugado.
- Cucaracha: Cuando alguien la juega, el resto de jugadores tienen que buscar en sus manos una carta cuyo número que coincida con el número de la carta de la cucaracha. El primer jugador que la ponga en la mesa dejará esa carta en la pila, el resto recuperara las suyas a sus respectivas manos. (No se pueden dar jugar cartas de polillas tramposas).
- Mosquito: Cuando alguien juega una carta de mosquito el resto de jugador tienen que poner su mano rapidamente encima de la carta, haciendo una pila de manos. El último en poner la mano recibe una carta de las manos de cada uno de los otros jugadores. (No se pueden dar cartas de polillas tramposas).
Polillas Tramposas: Son cartas que nos se pueden jugar y hay que desahacerse de ellas haciendo trampas. Si tienes la carta del chinche si las puedes jugar, son tienen ninguna acción asociada, pero hay que respetar la regla de la numeración. (Se explica más adelante).
Cartas de Lámpara: Son cartas que no provocan ninguna acción, simplemente sirven para irse descartando e ir pasando el turno al siguiente.
Modo de Juego y Dinámicas
El primer paso de cada partida es asignar la carta de chinche a uno de los jugadores. Puede ser al más mayor, al más joven o por sorteo. Una vez se le haya dado a un jugador se procedera a barajar el resto de cartas y a repartir 8 a cada jugador. Es importante que las cartas se repartan boca abajo y que ninguno de los jugadores se las enseñe al resto.
El resto de cartas sobrantes se pondrán en un mazo, boca abajo, en mitad del espacio de juego. La carta superior del mazo se descubrirá y se pondra boca arriba pero como comienzo de un nuevo montón. Empieza aquí la ronda de turnos.
El jugador que empiece deberá jugar una carta con un número superior o inferior (inmediatamente) a la carta descubierta al principio, esto se aplica a todos los jugadores durante toda la partida. Es decir, si sale un 2, solo podrá jugar una carta cuyo número sea un 1, o una carta cuyo número sea un 3. Si sale un 5, solo podrá jugar una carta cuyo número sea un 1, o una carta cuyo número sea un 4. En caso de no tener una carta apta para se jugada, se robará una del mazo y pasará el turno al siguiente jugador.
(Las cartas de polilla tramposa no se pueden jugar, y las cartas de insectos tienen efecto especiales que explicamos arriba).
Una vez jugada una carta y resuelta la acción (en caso de tenerla) el turno pasa al siguente jugador. Durante la partida los jugadores se deberán descartar de las cartas de polilla tramposa haciendo trampas, pero dentro de unas reglas:
- Si solo queda en la mano de un jugador una carta de polilla tramposa no podrá descartarse de ella, deberá esperar a tener otra carta para intentar descartarse haciendo trampa.
- Los jugadores solo pueden descartarse de las cartas de polilla tramposa de una en una.
- Las manos de los jugadores siempre deben estar encima de la mesa.
¿Como se hace trampas entonces? Por ejemplo…
- Tirandola hacia atras al suelo en un momento de despiste.
- Poniendo una carta de polilla debajo de la que vayas a jugar.
- Metiendote disimuladamente la carta por la manga de la chaqueta.
Si el chinche, el jugador que tiene la carta de chinche, pilla a alguien haciendo trampa, la carta de la que pretendía descartarse el jugador, vuelve a su mano. Además el chinche entrega otra carta cualquiera de su mano al tramposo y le pasa la carta del chinche. Siendo el tramposo el nuevo vigilante.
IMPORTANTE: Ningun jugador puede dar pisas al guardián de que otro jugador está haciendo trampas, ni quejarse, ni nada. Aquí la autoridad es el chinche.
Si el guardían chinche te acusa de hacer trampa de forma injusta, y no lo estabas haciendo (hay que ser honestos para que el juego funcione) el guardián roba una carta.
IMPORTANTE: El guardián, o jugador que tenga la carta del chinche sí podrá jugar cartas de polilla tramposa en la pila como si fuera cualquier otra carta (tiene numeración igual que el resto, pero no provoca ninuna acción si se juega).
Una vez que alguien se haya descartado de todas sus cartas gana la partida. El resto de jugadores deberán sumar los puntos que acumulan las cartas que tienen en sus manos, siendo las cartas de lámpara de 1 pto, las de insectos de 5 pts y las de polilla de 10 pts. El ranking se establece de menor puntuación a mayor puntuación.
Conclusión
Polilla tramposa es un juego muy divertido y dinámico pero para que funcione hay que ser honestos. De nada sirve intentar hacer trampas extra permitiendo el juego hacer alguna.
Si hay que buscarle un punto negativo es que cuando se juegan con las mismas personas varias veces, acabas conociendo los trucos de todos y el efecto “pillo” pierde un poco. También es muy interesante jugar con niños pequeños ya que puedes ver como se las ingenian, la verdad… a más de uno le sorprenerá su capacidad de escaquearse.
En definitiva, un juego perfecto para pasar un buen rato, divertido y relativamente sencillo, no es de extrañar que quedara entre los mejores juegos de mesa de año 2013. Además se puede llevar de viaje ya que no se necesita la caja para nada, con llevar el mazo de cartas es suficiente.
Otro gran punto a favor es su precio. No supera los 15 Euros y si hay alguna buena oferta lo pueden adquirir por menos de 12 Euros. Una gran opción para regalar a un amante de los juegos de mesa… o de las polillas, o de las trampas!!
Versiones y Ofertas de La Polilla Tramposa
La Polilla Tramposa no tiene ninguna otra versión ni tampoco ninguna expansión. Desde Devir no han indicado si ampliaran el juego de alguna manera por lo que a corto plazo solo tenemos disponible el juego original.
Para encontrar este divertido juego de mesa al mejor precio solo tienes que echar un ojo abajo. La Polilla Tramposa no se caracteriza precisamente por ser un juego caro, por lo que las ofertas y los descuentos no se notan tanto, aunque quizá si puedas ahorrarte unos eurillos. ¡Aquí abajo dejamos el juego de cartas al mejor precio!
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Última actualización el 2024-04-19 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados